'HASTA LA HORA DEL OCASO AMARILLO
CUÁNTAS VECES HABRÉ MIRADO
AL PODEROSO TIGRE DE BENGALA
IR Y VENIR POR EL PREDESTINADO CAMINO
DETRÁS DE LOS BARROTES DE HIERRO,
SIN SOSPECHAR QUE ERA SU CÁRCEL.'
(Jorge Luis Borges, a 25 años de su muerte)